Regalitos navideños II

Siguiendo con los regalillos navideños, a "las chicas" les llegó una segunda tanda de cositas. Otra primera experiencia, aunque esta quedó mucho mejor que la anterior. Y es que la moda de Hama Beads ha llegado a mi casa.
La técnica es muy similar a la del juego Beados que tiene mi peque de las navidades paseadas, la diferencia es que las bolitas se pegan con agua y los tubitos de Hama Beads se pegan dandoles calor con la plancha.

Mis beads son de tamaño mini, pero en cuanto consiga pasarme un día por Ikea me haré con estas que son del tamaño midi pero bastante más baratas.
 Hay un colgantito para cada "chica", empezando por la madre una kokeshi, para la fotógrafa una camarita y para la librera un librito, este es el más original, ya que es en 3D, y aunque no se ve demasiado bien sobre el fondo negro, tiene todos los elementos de un buen libro.

 Lo bueno del tamaño mini es que se pueden hacer cositas pequeñas, tanto pendientes como colgantes con mucho detalle sin que sean demasiado grandes. Estos los he adaptado de patrones encontrados por internet, reduciendo un poco el tamaño. En el post de diseños y patrones pondré los modelos originales y sus enlaces. También un par de enlaces para descargar patrones, aunque directamente en google se pueden encontrar de casi cualquier temática .

Otro regalito fueron un par de  muñequitas amigurumi que pidió mi tía para sus nietas, así que, para que no fuesen iguales entre si, hice una kokeshi y un minion como los ya publicados en sus respectivos post. La diferencia, como siempre, los colores y peinada de las kokeshis y los pelos y sonrisa del minion.

 Para el minion segui el patron de lanasyovillos.com con ganchillo de 2,5 para que quedase de un tamaño decentillo, al fin y al cabo son niñas de 3 y 5 años, no podían ser muy pequeños.
 La kokeshi tiene un peinado más "tradicional", que se hace montando dos semicírculos, uno más grande que el otro, en lugar de un solo semicírculo como un casquete. Como el moñito quedaba muy atrás, le puse unas florecitas y ojitas simulando una peineta. Para poder hacer las flores use  nudo francés flojito.
A las niñas les gustaron las muñecas,  la mayor, q1ue fue la que llegó antes, agarró encantada "la niña" en cuanto la vio, y como la pequeña no llegó a verla no tuvieron que pelearse por cual era para cada una. Es gratificante cuando sabes que lo que haces gusta, y como son niñas pequeñas, no están condicionadas por ser familia y son más sinceras.

El siguiente regalo fue para mi madre, un par de broches de flores: una poinsettia o flor de pascua, y una rosa.
 Para la poinsettia utilicé el patron gratuito de Abejitas.org con un ganchillo de 2,5 para que no quedasen demasiado tupidos los pétalos. Recien planchada la flor queda muy bien, tiesita y con el doblez del pétalo bien marcado, pero enseguida pierde la consistencia. Como yo no tengo apresto le encargué a mi madre que, antes de usarlo, lo almidonase un poco. Cosas de la confianza.


La rosa la saqué de esta página. Las hojas también se quedan muy blanditas y se debería dar un poco de almidón .

El patrón  de poinsettia se puede descargar directamente de su página, no lo voy a poner en el post de diseños y patrones, el esquema de la rosa y las hojitas si.

 Y con este, acabé los regalos de Navidad, algunos justo a tiempo para que llegaran con los reyes majos.
Pero eso no quiere decir nada, Enero no es un mes tranquilo precisamente: cumpleaños de suegra y cuñadas ( vaaale, una es en febrero, pero el día 1, o como ella suele decir, el 32 de enero)

Regalitos navideños I

Las vacaciones son una época para descansar, excepto si quieres hacer cosas a mano. O eres madre. O ambas cosas.
Mis vacaciones han estado bastante ajetreadas entre comidas y cenas familiares, cabalgatas, ferias navideñas y visitas varias, algún encarguito que otro y buscar y "fabricar" los regalos de este año.

Uno de los métodos más "baratos" para hacer regalos es hacerlos tú mismo. Y digo "baratos" porque, aunque quieras ahorrar, acabas gastando más de lo que pensabas. Y es que , últimamente al menos, los materiales buenos son bastante caros. Un ejemplo muy claro son las lanas: por lo que te cobran por dos ovillos para hacerte una bufanda, tienes un jersey ya hecho. Que esa es otra, el tiempo que se invierte en hacer las cosas no cuenta. Con mucha suerte, haces tu regalo con la mejor de las intenciones, y te lo agradecen, e, incluso, en ocasiones te alaban.

A mi me ha pasado estas navidades. Les ha gustado lo que hemos (mi peque y yo) hecho. Y la ilusión que hace cuando te dicen que les ha gustado, no es lo de menos, sobretodo porque sólo tú sabes las peripecias por las que has pasado y el tiempo y cariño que has dedicado a cada cosa.

Empezamos la temporada de regalos navideños con el regalo del amigo invisible de clase de la peque, a ella le tocó un chico al que le apasionan los videojuegos, por lo visto, de cualquier tipo y plataforma. Y como había que "hacer" algo, decidimos hacer una "bola de nieve" con un personaje de algún videojuego. Los materiales básicos fueron fáciles, un frasco de cristal bien limpio, agua, purpurina y un poco de glicerina para que la purpurina calles e un poco más despacio.
Lo difícil fue encontrar un muñequito pequeño que cupiese en el frasco y que no fuese demasiado caro. Al final, después de buscar por tiendas de chuches y jugueterías varias, en el Toys'r'us encontré unos sobrecitos con personajes de Angry Birds Star Wars, así que con uno y un poco de plastilina para hacer la base y que se viese la figura por encima de la tapa, nos pusimos manos a la obra.
Como resultó ser un Darth Vader, solo se veía el casco, y como queríamos que se viese que era el personaje del juego, con un poco de plastilina roja, un terminal de pulsera y un tubito de pegamento con brillantina le hice una espada láser. No fue demasiado difícil, pero me daba miedo que la plastilina se fundiese en el agua, así que rebuscando en la red di con varias formas de endurecer la plastilina.
Lo que yo hice para endurecer la plastilina, tanto la espada como la base, fue darle una buena capa de laca del pelo y dejar que se secase. Después vinieron un montón de capas de esmalte de uñas transparente, hasta que me pareció que ya eran suficientes. Pegue la  tapa a la base y esta a la figurita con la pistola de pegamento caliente, echamos un montón de purpurina (demasiada, se nos fue la mano) al frasco, después un poco de glicerina y llenamos de agua. La tapa la cerramos con fuerza, y la sellé con más pegamento caliente. Para que no se viera la tapa (era de un frasco de aceitunas) pegamos un poco de papel de plata, y para envolver papel pinocho. Parece ser que al chaval le gustó

1- Base

2- alas por fuera

A quien si que le gustó fue a mi peque, que quiso repetir técnica para regalar a mi hermana y a "las chicas", unas primas pucelanas a las que iban a ir a visitar aprovechando las fiestas de navidad.
La peque decidió que quería hacer tulipanes y mariposas, un tulipán blanco para mi hermana, uno rojo para "la chica" mayor  y dos mariposas para las otras dos.
Esta es mi primera incursión con la goma EVA, así que no me ha quedado exactamente como yo quería, pero  a ellas les gustó.

3- alas por dentro

 Las mariposas no se aprecian, pero están hechas en tres colores,  siguiendo un patrón que saqué de  google, recortando en un color cada una de las partes coloreadas en rojo. Pegué por fuera de las alas del diseño básico 1 el diseño 2 y por dentro de las alas el diseño 3.

 Con una plancha del pelo calenté la parte del cuerpo de la mariposa para poder doblar las alas, y pegue el cuerpo a un trozo de brocheta de madera. En la tapa del frasco pegué una plancha de goma EVA para que no se viese por dentro y a la goma la brocheta un poco inclinada para que no quedase la mariposa en vertical.

Para los tulipanes utilicé el patrón de brochesdefieltro.net. Queda mucho mejor en fieltro porque es más maleable, y tampoco me atrevía a calentar mucho la goma Eva para darle forma. Aunque con un poco de práctica y recortando un poco los bordes del patrón podría quedar muy bien.

Para ellas también fue el siguiente regalo: unos colgantitos para el móvil ( o el llavero o lo que quieran).  Pero esto ya se esta alargando demasiado, será en una segunda parte.

Nieve en la ventana

Una de las decoraciones típicas de estas fechas son los copos de nieve. Personalmente, me gustan mucho más que las hojas de a cebo o el muérdago, y como yo no soy creyente, lo de los reyes magos y belenes me va un poco grande. Así que me puse a hacer un puñado de copos de nieve en ganchillo para decorar la clase de mi peque. Porque hace tres o cuatro años que no ponen nada en su clase, aunque otras clases si que las decoran. Así que me armé de paciencia, un ganchillo finito y algodón blanco y me propuse celebrar el Solsticio de Invierno, qué pasa.
Encontré un montón de montones de patrones de copitos de nieve, la mayoría en un inglés que me superaba ampliamente, y en diferentes tamaños. De entre todos los patrones que encontré me decanté por estos.

 Aquí están aún sin acabar de rematar, pero ya planchaditos y apunto para endurecer. A mi me parecen muy monos, la verdad. Para endurecer el ganchillo hay varios métodos, pero el que me pareció mejor fue mezclar cola blanca y agua a partes iguales (lo que mi peque conoce como "mejunje art atack") Como lo que yo quería era una guirnalda de copos que, al moverse, brillasen un poquito,  lo que hice fue ir echando un poco de purpurina plateada encima de los copos empapados con la cola blanca y dejarlos secar. Como tenia unos cuantos y poco espacio, los fui poniendo sobre capas de plástico del de forrar los libros para que no se pegasen entre si ni a la mesa. Le costó un poquito secarse, la verdad, es lo que tiene el plástico, que conserva la humedad que no veas, incluso poniendo lo a secar junto al radiador. Al final, y como se me echaba el tiempo encima ( qué menos que una semana de clase decorada antes de las vacaciones) aceleré el proceso con el secador de pelo hasta que ya no quedasen pringosos, y para acabar de endurecer, al radiador.  Eso si, el suelo del cuarto de baño (y el del resto de la casa también, para qué mentir) me quedó bien brillantito con la purpurina.

Finalmente conseguí que se endureciesen lo suficiente para poder colgarlos con hilo transparente (un poquito menos duro que la pita) de una larga cadeneta blanca intentando alternar copos grandes con otros más pequeños y ponerlos a distintas alturas. El gato se lo pasó en grande  "ayudándome" a colgarlos, pero finalmente lo conseguí, justo a tiempo para ir a dormir y llevárselos a clase al día siguiente.

Desde fuera (y lejos) se adivinan

Colocados en la ventana

Y por fin, el último día de clase.
Mi peque quería cortar los copos
y darle uno a cada compi de clase, pero con el trajín de de la visita del Olentxero, la kalegira, bailes y, sobre todo, los regalos del "amigo invisible" al profesor se le olvidó cortarlos, y allí están colgando aún. Supongo que no pasa nada por dárselos el día 8 de Enero...